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El futbol profesional a nivel nacional
Yuri Hernando Hernández
Muchas veces, el fútbol profesional solo capta la atención del aficionado en el nivel de primera división. Es más, en el actual mundo globalizado, las ligas nacionales han dejado de ser atractivas para un sector de los espectadores, quienes se centran muchas veces en las competiciones internacionales; a pesar de ello, el futbol es un fenómeno social que se convierte en el estandarte y en la bandera de pequeñas poblaciones, con equipos que representan el sentir más diverso de las diferentes regiones o ciudades de cada nación. Por ello, no podemos olvidar y mucho menos dejar de fomentar el futbol modesto, darle oportunidad para que pueda ilusionarse con llegar a una primera división o a un torneo internacional.
El futbol modesto, a la sombra de la gran primera división, es el artífice silencioso del desarrollo futbolístico de un país, y a diferente nivel, también debe ser profesional o semiprofesional. En Colombia, desafortunadamente, lo estamos dejando de lado, centrándonos sólo en el gran negocio de la primera división, sin fortalecer las bases para que el producto llamado profesional cuente, a futuro, con mejor calidad. Por eso, hoy hablaré desde mi experiencia como entrenador y de cómo he visto que fortalecer el futbol semiprofesional favorece al futbol de élite, que todos vemos y seguimos por la tele.
¿Cuál es, en la actualidad, la estructura profesional del futbol colombiano? El futbol profesional colombiano solo funciona, a nivel nacional, con una primera división de 20 equipos, en la cual existe la figura del descenso; y una segunda categoría integrada por 16 equipos, donde existe la figura del ascenso pero no la del descenso. También aparece una tercera división, la cual funciona completamente desconectada del sistema profesional, algo que genera que, de allí para abajo, no tengamos una estructura de futbol profesional en el contexto regional, departamental ni local.
Esta situación lleva a que muchos jugadores en proceso de formación, que aún no han explotado todo su potencial, terminen por dejar el futbol, porque con 21-22 años no tienen donde jugar; también lleva a que tengamos regiones o ciudades intermedias que no pueden tener un orgullo local, o unos colores a los que seguir, con verdadero sentido de pertenencia. El fútbol en las regiones con menos poder mediático mueve muchas cosas, como la prensa y el comercio local. ¿Y qué sucede desde el punto de vista del entrenador? De acuerdo a la actual estructura, tenemos solo 36 banquillos en los que poder desarrollar nuestra labor profesional y, si a esto le sumamos el auge de traer entrenadores del sur del continente, los espacios en primera división para quienes buscamos una oportunidad en el fútbol, más allá de la idoneidad profesional, son cada vez menores, ya que la estructura de divisiones inferiores no es sólida en todos los clubes profesionales, para poner al servicio de los jugadores en plena fase de evolución nuestros conocimientos, en equipos de categoría sub-20.
Por supuesto, cada país debe adaptar su estructura de fútbol a las necesidades específicas que tiene. Para que podamos hacernos una idea de cómo fortalecer los cimientos del fútbol colombiano, veamos los casos que conozco y dentro de los cuales he trabajado, como son España y México:
Estructura del futbol en España
· Primera División Profesional: se juega a nivel nacional, con 20 equipos, 3 de los cuales descienden cada temporada
· Segunda División Profesional: se juega a nivel nacional, con 22 equipos, 3 clubes ascienden a primera división y 4 equipos descienden a la Segunda División B cada temporada. Es importante resaltar que los equipos filiales de los clubes de primera división pueden competir en Segunda, siempre y cuando el primer equipo compita en Primera. En caso de que este descienda, el equipo filial automáticamente caerá a Segunda B.
· Segunda División B, Semi Profesional: se juega a nivel nacional, dividida en 4 grupos de 20 equipos, que juegan una primera fase zonal (repartidos por ubicación geográfica), con formato de ascenso y descenso.
· Tercera División, Semi Profesional: se disputa a nivel nacional, dividida en 18 grupos, cuya composición puede variar de 18 a 22 equipos por grupo, distribuidos geográficamente por departamentos. Esta competición es organizada por lo que, en Colombia, conocemos como las ligas. La competición cuenta con ascenso y descenso.
Para conocer más detalles, en cuanto al sistema de competición, se puede consultar la estructura completa aquí.
· Preferente – Primera – Segunda – Tercera Regional: Son categorías de fútbol amateur, que se juegan a nivel local o departamental, en un radio no superior a 150 kilómetros. Entre cada una de ellas existe ascenso y descenso, de tal manera que un equipo de tercera regional puede ascender hasta categoría preferente y, desde allí, acceder a tercera división, para ser parte del sistema profesional, con la posibilidad real y reglamentaria de llegar hasta primera división, si logra todos los ascensos.
Estructura del fútbol en México
· Primera División Profesional Liga MX: son 20 equipos, con descenso.
· Segunda División Profesional Liga de Ascenso: En total 18 equipos, con sistema de ascenso y descenso.
· Segunda División B Semi- Profesional Liga Premier Sub 23: Tiene sistema de ascenso y descenso, se divide en 4 grupos de 20 equipos, distribuidos por cercanía geográfica. Es obligatorio, para los equipos filiales de primera y segunda división, contar con un equipo que compita en esta categoría.
· Tercera División Amateur Sub 20: Funciona con sistema de derecho a ascenso.
Como podemos ver, la estructura del futbol profesional, fuera de Colombia, es mucho más amplia; no se reduce a 36 equipos y da la posibilidad de que los equipos que desarrollan bien su trabajo, puedan escalar hacia la élite de futbol profesional, abriendo espacio a todos aquellos jugadores que se nos quedan por el camino y que, con una competencia idónea, podrían explotar todas sus capacidades y finalizar sus procesos de formación de manera adecuada.
Ampliar la estructura del futbol profesional, en el caso colombiano, sería igualmente beneficioso para los clubes de primera división, que podrían tener equipos filiales en donde continuar el proceso de formación de sus futbolistas, sin verse en la obligación de prestarlos a otros clubes, para que tengan acceso directo y constante a la competencia.
Es obvio que no podemos pretender instalar tres divisiones profesionales, aparte de las dos existentes, de un momento para otro, pero sí deberíamos comenzar por reducir la brecha entre la segunda y la tercera división, que ya se juegan en nuestro país, introduciendo la Segunda División B Sub-23 o Sub-25. Así, equipos con trayectoria en nuestro futbol aficionado, como la Escuela Carlo Sarmiento Lora, Caterpillar Motor, Maracaneiros, entre otros, podrían tener una visión ilusionante para crecer en el mediano plazo, así como elevar el nivel de nuestros deportistas para que, a futuro, podamos ver mejor fútbol en la primera división. De ahí la importancia de la inclusión de los ascensos y descensos, en todas las categorías de la estructura profesional colombiana.
Actualmente, uno de los impedimentos que bloquea el correcto desarrollo de nuestro fútbol es la negativa de los clubes de segunda división para ampliar la liga a 20 equipos y permitir el descenso, ya que están en juego los derechos de televisión. Es claro que este obstáculo debe ser superado, para asumir que quien no lo hace bien deportivamente, y pierde la categoría, pierde los derechos televisivos y económicos. Debemos hacer esa clase de modificación, si queremos que nuestro fútbol se desarrolle verdaderamente, para poder considerarnos competidores reales, frente a los grandes del balompié en el continente.